martes, 14 de septiembre de 2010

Perturbación Angustiosa


Según la Real Academia Española el miedo es la “perturbación angustiosa del ánimo por un riesgo o daño real o imaginario”. Una porción de ese miedo sirve a las personas para estar alerta, es una herramienta del propio cuerpo y por eso se puede considerar como bueno.

La otra porción, que se puede considerar mala, es la que relaciona al miedo con lo imaginario, es decir con lo que puede ser.

El miedo, que como estado de ánimo tiene una dimensión individual y una social, tiene por efecto generar un estado de vulnerabilidad en las personas que las vuelve mucho más maleable. En este sentido quien tenga la capacidad de generar ese estado en una persona o en una sociedad tiene en sus manos una interesante fuente de poder.

Pero donde está el miedo? Podríamos nombrar personas que dan mucho miedo -sin tener que irnos del país para buscar el ejemplo- pero creo que el miedo en estos días es cada vez más incorpóreo por ser cada vez más imaginario.

Me pareció interesante el tema pero tengo que agradecer la idea a empresas de seguridad como “Puertas Pentágono” o a los laboratorios que hacen “Lisoform” puesto que tienen las publicidades más ilustrativas para ver cómo se maneja el miedo.

Publicidad N° 1

Un señor de pelo negro un poco ruliento, moreno, transpirado y mal vestido corre alocadamente contra la vivienda de una familia tipo que en la publicidad es la imagen de una madre sentada en el sillón, el marido leyendo un libro y los nenes jugando. Este esquema se complementa con colores cálidos para la familia y el prototipo de criminal en colores grises y negros.

La publicidad continúa en la marcha violenta del señor criminal hacia la puerta pero como resulta que esta familia tenía una puerta Pentágono –que al parecer son infalibles- el tipo se choca contra una barrera inviolable al ritmo de la imagen de su cara arrugándose contra la puerta.

Moraleja: Comprate una Vs Podrían robarte o matarte.

Publicidad N° 2

Esta se divide en varios cuadros cortos que pasan del bebe con la mano en la boca, al nene embarrado jugando a la pelota, las pisadas del perro, etc. Todas las imágenes se van deteniendo y una lupa ultrasónica detecta gérmenes en los dedos del bebé.

Entonces como un aura “verde limpio” aparece Lisoform que los mata a todos menos al 0,00001 por ciento y los personajes terminan felices comiendo perdices.

Moraleja: Bañate en Lisoform Vs Te podes enfermar.

En fin, estas publicidades se repiten constantemente en todo tipo de producto, inclusive el político que en sus eternas carreras electorales maneja el factor del miedo en uno y otro sentido para obtener votos creando o alentando un problema para el cual ellos tienen la solución perfecta.

Sin dudas este sistema es altamente efectivo pero, teniendo en cuenta que esta porción del miedo es mucho mas imaginaria que real, basta con que cada persona dude de las verdades absolutas que se le plantean a cotidiano y tenga capacidad crítica para desconfiar de todo aquel que quiera generarle una perturbación angustiosa del ánimo.